09 diciembre 2021

Una apreciación de las estrategias didácticas

 

La estrategia requiere pensamiento,

las tácticas requieren observación

Max Euwe

 

A las y los estudiantes de la asignatura Didáctica en Educación Media Superior de los grupos sabatino y escolarizado de la Universidad del Golfo de México UGM campus Tecamachalco, Pue.

 

El poema Táctica y estrategia de Mario Benedetti tiene como contenido contundente la información que se requiere para entender el concepto de estrategia en un ámbito como el educativo.

 

Por eso cuando Benedetti en el final de su poema remarca una posición firme de poder establecer que el objetivo inicial trazado a se concrete a través de la consecución de  la formulación de diferentes tácticas que se plantea conseguir, con el fin de llegar a la meta que se ha establecido a partir de la formulación de una particular estrategia cuando de manera sencilla indica que:

 

Mi estrategia es en cambio más profunda y simple

mi estrategia es que un día cualquiera no sé como

ni sé con qué pretexto por fin me necesites

 

De tal forma que este poema se convierte en un recurso didáctico valioso que se utiliza para introducir y ejemplificar el tema correspondiente a las estrategias didácticas sobre todo a partir del nivel medio superior

 

De acuerdo a Contreras (2013) Actualmente se habla de estrategia en todos los ámbitos: en los negocios, en la política, en la religión, en la cultura, en fin en cada aspecto de la vida diaria. Esta palabra se convirtió en una acepción de uso generalizado, que debe adornar o formar parte en toda la literatura relacionada con distintos campos del conocimiento.

 

Como lo expresa Davies (2000), debido a que la estrategia se caracteriza por tener múltiples opciones, múltiples caminos y múltiples resultados, es más complejo su diseño y son más difíciles de implementar que otras soluciones lineales. Tal como lo afirma el autor, hablar de estrategia se puede convertir en una torre de babel en la que muchos expresan ideas y quieren hacerlas valer, pero que nadie entiende a nadie.

 

Para Orellana (2016) Una estrategia didáctica es más que solo aplicar una técnica con un listado de actividades o tareas para llevar a cabo, (Mansilla y Beltrán, 2013, p. 29) la definen de la siguiente manera: “La estrategia didáctica se concibe como la estructura de actividad en la que se hacen reales los objetivos y contenidos”.

 

(…) Los docentes hacen uso de estrategias didácticas para desarrollar los contenidos de un programa y transformarlos en un concepto con significado, a este proceso se le llama trasposición didáctica, porque es la herramienta que permite traspasar la información de manera didáctica.

Para Parra (2003) Las estrategias de aprendizaje por su parte, constituyen actividades conscientes e intencionales que guían las acciones a seguir para alcanzar determinadas metas de aprendizaje por parte del estudiante. Son procedimientos que se aplican de un modo intencional y deliberado de una tarea y que no pueden reducirse a rutinas automatizadas, es decir, son más que simples secuencias o aglomeraciones de habilidades.

De tal forma que la caracterización de las estrategias de aprendizaje se dan a partir de que

ü  Su aplicación no es automática sino controlada

ü  Implican un uso selectivo de los propios recursos y capacidades disponibles

ü  Las estrategias están constituidas de otros elementos más simples que son las técnicas de aprendizaje, las destrezas o habilidades

De acuerdo al ITESM, (s/f)  Existe una gran cantidad de estrategias y técnicas didácticas, así como también existen diferentes formas de clasificarlas. En este caso se presentan distinciones en dos diferentes ejes de observación: la participación, que corresponde al número de personas que se involucra en el proceso de aprendizaje y que va del autoaprendizaje al aprendizaje colaborativo y, por la otra, las técnicas que se clasifican por su alcance donde se toma en cuenta el tiempo que se invierte en el proceso didáctico, en esta clasificación encontramos técnicas que se utilizan para la revisión de un contenido específico, o bien, estrategias que pueden adoptarse a lo largo de un curso o de todo un plan curricular.

Para este texto solo haremos referencia solo al eje de la participación (donde) se distinguen los procesos que fortalecen el autoaprendizaje, el aprendizaje interactivo y el aprendizaje por la participación en un grupo de forma colaborativa.

Clasificación de estrategias y técnicas según la participación:

 

Participación

Ejemplos de estrategias y técnicas (actividades)

Autoaprendizaje

• Estudio individual.

• Búsqueda y análisis de información.

• Elaboración de ensayos.

• Tareas individuales.

• Proyectos.

• Investigaciones.

Aprendizaje interactivo

• Exposiciones del profesor.

• Conferencia de un experto.

• Entrevistas.

• Visitas.

• Paneles.

• Debates.

• Seminarios.

Aprendizaje colaborativo

• Solución de casos.

• Método de proyectos.

• Aprendizaje basado en problemas.

• Análisis y discusión en grupos.

• Discusión y debates.

 

Contreras Sierra. Emigdio Rafael, (2013), «El concepto de estrategia como fundamento de la planeación estratégica». Pensamiento & Gestión,  (35),152-181. ISSN: 1657-6276, extraído del sitio:   https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=64629832007

ITESM, (s/f) «Estrategias y técnicas didácticas en el rediseño», Dirección de Investigación y Desarrollo Educativo, Vicerrectoría Académica, Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, extraído del sitio: http://sitios.itesm.mx/va/dide/documentos/inf-doc/Est_y_tec.PDF

Orellana Guevara. Catty, (2016), «La estrategia didáctica y su uso dentro del proceso de enseñanza y aprendizaje en el contexto de las bibliotecas escolares», E-Ciencias de la Información, vol. 7, núm. 1, pp. 134-154, 2017, Escuela de Bibliotecología y Ciencias de la Información, Universidad de Costa Rica, extraído del sitio: https://www.redalyc.org/journal/4768/476855013008/html/

Parra Pineda Doris María, (2003), «Manual de estrategias de enseñanza/aprendizaje», Servicio Nacional de aprendizaje, Ministerios de la Protección Social, Diciembre, Medellín, Colombia, extraído del sitio: https://www.uaem.mx/sites/default/files/facultad-de-medicina/descargas/manual-de-estrategias-de-ense%C3%B1anza-aprendizaje.pdf   

Encuentros y desencuentros entre el empirismo y el racionaliso

 No hay que prestar atención a quienes nos aconsejan, so pretexto de que somos hombres, no pensar más que en las cosas humanas y, so pretexto de que somos mortales, renunciar a las cosas inmortales”.

Aristóteles


 A las estudiantes de la asignatura Filosofía  y epistemología de la Educación  2021-2022 del grupo escolarizado de la Universidad del Golfo de México UGM campus Tecamachalco, Pue.


Galileo Galilei destacaba que “Contra todas las apariencias en las que por otra parte estén todos aparentemente de acuerdo, avanzamos guiados por la razón. Y la razón nos pide pruebas que tarde o temprano, van y acaban con las apariencias. Bien lo dice el dicho popular las apariencias engañan, la razón no engaña, pero es difícil que se oponga a las apariencias”.

 

La corriente filosófica denominada idealismo de Kant propuso de alguna forma trata de conciliar entre una postura y otra de alguna manera convirtiéndose en mediador retomando elementos por un lado del empirismo y otro tanto del racionalismo al que se conoce como idealismo trascendental que de alguna manera vincula tanto aspectos internos y externos del sujeto.


La dualidad que se encuentra entre las concepciones teóricas por las cuales se ha conocido al empirismo y racionalismo hoy en día sigue aún esa eterna diferenciación entre una y otra forma de percibir la realidad.


Evidentemente cada una de estas corrientes filosóficas permean a los largo del tiempo, y mantienen esa contradicción entre quien debe de prevalecer como tal y no dando pie a que su posición asumida se vea vulnerada.


Hoy en día precisamente el desarrollo del proceso educativo nos hace ver que se requiere tanto del empirismo como del racionalismo ya que son elementos que aunque tengan elementos completamente diferenciados de alguna forma uno esta vinculado al otro.


Y es que las diferencias hacen también que puedan tender puentes para conformar los paradigmas que continuaron apelando a uno o a otro.

 

Tal es el caso de que históricamente ya en el método científico se necesita de la parte del empirismo cuando se tiene que desarrollar  la percepción sensorial sobre todo de la observación y establecer periodos de tiempo para que este se convierta en momentos que generen experiencia.

 

Por el otro lado vemos que la generación de las ideas propias del racionalismo se manifiesta cuando se elaboran las suposiciones o conocidas hipótesis.

 

De tal manera que el método científico que no el positivismo logra conjuntar los elementos que generan ese distanciamiento que por momentos no lo parecería y es que son elementos tan distantes pero a la vez donde se tienden elementos donde tienen caminos que convergen en líneas paralelas teniendo como vía de riel y conducción el método científico.

28 octubre 2021

La educación en México entre la exclusión y la inclusión

 


Nuestra capacidad para alcanzar la unidad en la diversidad

será la belleza y la prueba de nuestra civilización

Mahatma Gandhi

A las y los estudiantes de la asignatura Educación especial

e inclusión educativa de la Universidad del Golfo de México

UGM campus Tecamachalco, Pue

 

En el ámbito educativo la inclusión y exclusión son dos polos diametralmente opuestos ya que en uno se dan las condiciones para la apertura y el acceso a la educación y en el otro de manera contraria se bloquea y niega este acceso.

 

Y es muy evidente desde el momento en que el docente sobre todo el que sigue ejerciendo desde las prácticas de la corriente tradicional, manteniendo un esquema estrictamente vertical que bloquea y mantiene su posición de autoridad poseedora del conocimiento, y que por tal hecho no se preocupa por identificar en lo mínimo los avances o retrocesos de los estudiantes regulares y mucho menos poner atención a las diferencias individuales de algunos estudiantes que requieren de la atención personalizada y que muchas de las veces se les toma en cuenta.

 

Y es precisamente en el caso de los estudiantes con algún tipo de diferencia individual en el ámbito escolar es la persona en quien se debe de centrar la atención y a la cual se le debe de brindar la atención adecuada, para efecto no tan solo de adecuar los contenidos curriculares sino también el entorno para hacerlo más accesible adaptándolo a un ambiente donde en la medida de lo posible las limitaciones puedan eliminarse en cuanto a la infraestructura y los accesos sea más cordial con los estudiantes con algún tipo de discapacidad, sea esta física-motora, visual o auditiva.

 

Para Cruz et al (2017) “La educación inclusiva la podemos entender desde dos miradas. En una primera está la parte de la ley, la política, el ordenamiento o imperativo que desde discursos oficiales han permeado las prácticas institucionalizadas y modificado elementos representacionales sobre el lugar de los “diferentes”. (…) representa un Derecho Humano de algunos grupos y por tanto, en ella subyace una lucha más bien política, donde lo que debe darse es la reivindicación de espacios que se han considerado excluyentes para algunos y segregatorios para otros.

 

Por otro lado, (…) puede ser entendida más como un elemento pedagógico y didáctico (Echeita, 2014), lo cual concierne a una serie de prácticas educativas y diseños para todos (Verdugo y Shalock, 2013, Booth y Ainscow 2000, UNESCO 2003), apoyos que deberían desplegarse y coadyuvar a que los estudiantes, sea cual sea su condición, puedan acceder al currículum y sobre todo a conocimientos y habilidades indispensables para su vida en autonomía y conforme a derecho.” (1)

 

De acuerdo a la información que proporciona la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México (s/f) “La USAER es una instancia técnico operativa de la Educación Especial, conformada por un Director, Maestros de Apoyo, Psicólogo, Maestra de Comunicación y Trabajadora Social. En el marco de la Educación Inclusiva, proporciona los apoyos técnicos, metodológicos y conceptuales que garanticen una atención de calidad a la población escolar y particularmente a aquellas alumnas y alumnos que enfrentan barreras para el aprendizaje y la participación, y que se encuentran en riesgo de exclusión: población con discapacidad o con capacidades y aptitudes sobresalientes, así como aquéllos que en los diferentes contextos, se les dificulta acceder o participar en las oportunidades de aprendizaje de los campos de formación”. (2)

 

De acuerdo a García et al (2015) “El total de USAER que se han creado en el país es de 1,690 y hay 4,208 CAM (SEP, 2014). Se dice que con las USAER se atienden alrededor de 28,000 escuelas del nivel básico, cerca del 10% de las escuelas del país (SEP, 2012), aunque no resulta claro cómo se llega a esta cifra, pues cada una de estas unidades atiende a cinco escuelas en promedio.(3)

 

El Instituto Nacional de Evaluación para la Educación en el documento “Principales cifras nacionales (4) señala que a inicios del ciclo escolar 2016-2017 en el rubro correspondiente a la Educación especial se encontraban funcionando 4478 USAER y que en ese mismo ciclo escolar existía un numero de 97553 escuelas primarias y 39265 escuelas secundarias  que dan un total de 136818 que equivale al 16.36 %, al igual que García et al citado en el párrafo anterior no existe claridad en el número de unidades de servicio denominado USAER como centros de atención a escuelas.

 

En el caso de que el funcionamiento de las USAER fuera optima, que es lo mas deseable, de alguna forma los medios y recursos con los que cuente un centro educativo por lo menos debería tener la preocupación en el caso del nivel básico como lo es la primaria realizar pruebas para conocer aspectos como la audición y visión, y por otro lado conocer las actitudes y comportamientos que manifiesta el niño, a la par de entender que también se conozca si existe alguna afectación en cualquier extremidad o algún otro aspecto que afecte a los niños al incorporarse a la escuela.

 

Con esa información se generaría un expediente donde se verifique en algún momento algún tipo de discapacidad que le persona tuviera al menos en el grado más leve y así poder desarrollar las estrategias adecuadas identificar desde un primer momento las barreras u obstáculos que se tendría que enfrentar el estudiante  para su optimo proceso de enseñanza-aprendizaje.

 

(1  (1) Cruz Vadillo. Rodolfo, Iturbide Fernández. Paulina, Santana Valencia. Emma Verónica, (2017), “Implicaciones de la inclusión de alumnos con discapacidad en la práctica educativa”, Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, Congreso Nacional de Investigación Educativa, COMIE, San Luis Potosí, extraído del sitio: https://www.comie.org.mx/congreso/memoriaelectronica/v14/doc/0585.pdf

 

(2 (2) AEFCM,  Antecedentes AEFCM”, extraído del sitio: https://www.aefcm.gob.mx/quienes_somos/aefcm/index.html


(3) García Cedillo. Ismael, Romero Contreras. Silvia, Rubio Rodríguez. Silviana, Flores Barrera. Vasthi Jocabed, Martínez Ramírez. Araceli, (2015), “Comparación de Prácticas Inclusivas de Docentes de Servicios de Educación Especial y Regular en México”, Actualidades Investigativas en Educación, vol. 15, núm. 3, pp. 238-254, Instituto de Investigación en Educación, Universidad de Costa Rica, extraído del sitio: https://www.redalyc.org/jatsRepo/447/44741347011/html/index.html


(4) Instituto Nacional de Evaluación Educativa “Principales cifras nacionales” Educación básica y media superior Inicio del ciclo escolar 2016-2017, serie Indicadores educativos, extraída del sitio: https://www.inee.edu.mx/wp-content/uploads/2019/01/P2M110.pdf

 

 

03 septiembre 2021

El proceso enseñanza-aprendizaje en tiempo de pandemia


Saber que enseñar no es transferir conocimiento, sino crear las posibilidades para su producción o su construcción
Paulo Freire
(Pedagogía de la autonomía saberes necesarios para
la práctica educativa, edit. Siglo XXI, 1997, p.47)

A las y los estudiantes de la materia Didáctica general
de la Universidad del Golfo de México
UGM campus Tecamachalco, Pue.
 

En el binomio que caracteriza al proceso de enseñanza-aprendizaje hoy en día y los actores fundamentales de tal hecho educativo a quienes se les otorga importancia como lo son el docente y el estudiante, ya que el acto educativo en el que se involucran, a diferencia de otros tiempos no depende de un solo actor sino de la conjunción de estos dos elementos para efecto de que se lleve a cabo y pueda realizarse este proceso donde la interacción de ambos es esencial para el desarrollo académico de ambas partes.

 

De ahí que tanto la función que desempeñan cada uno de los actores en el proceso educativo preponderante, ya que el docente tiene como objetivo principal el compartir y transmitir los conocimientos de una manera clara y objetiva y a su vez el estudiante debe de procesar los contenidos temáticos que se encuentra adquiriendo.

 

El proceso de enseñanza-aprendizaje desde el año 2020 se ha enfrentado a un serio reto al transitar la formación educativa que por excelencia se había desarrollado de manera presencial que se realizaba a través del establecimiento de las relaciones sociales que se manifestaban a través de la cercanía y el contacto directo entre docente y estudiante trasladándose a un esquema que impacto de sobremanera que implicaba un formato de alejamiento a través inicialmente de la sana distancia y que después se tradujo en aislamiento social donde la acción educativa se tuvo que desarrollar desde las casas tanto de docentes como de estudiantes para así continuar con el proceso educativo a distancia.

 

Esta situación de emergencia sanitaria ha orillado tanto a los docentes como a los estudiantes para que asuman el hecho de estar frente a una realidad que los orilla a enfrentar esta situación y como tal debe superarse tal obstáculo, ya que las clases presenciales aun con un retorno gradual identificado como híbrido donde se combinan grupos dividiéndolos en una parte presencial y la otra a distancia, como tal aún no se han podido concretar el retorno escolar, tal como desarrollaba con anterioridad ya que situación pandémica prevalece hoy en día.

 

Por lo cual la situación que estamos viviendo y que complica las relaciones sociales pero sobre todo las que se dan en un ámbito escolar y por lo consiguiente se requiera entender las diferencias que se encuentran en los  conceptos relativos al docente como son impartir clase y/o enseñar a la par de lo que se relaciona al estudiante que son: estudiar y/o aprender que pareciera son elementos similares pero no lo son.

 

Ya que esta reflexión parte de los comportamientos de los actores principales del proceso enseñanza-aprendizaje el docente y el estudiante.

 

Donde por un lado el docente debe de asumir el compromiso moral y ético de desarrollar su trabajo de la manera más adecuada posible, no tan solo impartiendo clases o transmitiendo conocimientos, por lo cual la actividad que realice aun en estos tiempos sea la formular de manera precisa y objetiva los conocimientos que va a compartir seleccionando: los temas de contenido académico adecuado, la metodología que se utilizara y las técnicas como la parte instrumental de esta.  

 

Y en la parte que corresponde al estudiante que este realice la valoración de elementos como tiempo y esfuerzo que debe realizar para concretar su  desarrollo educativo partiendo de los conocimientos previos que ha adquirido y analizando cuales son las habilidades que ha desarrollado o cuales son los obstáculos que ha tenido para aprender, a partir de la toma de conciencia del tipo o estilo de aprendizaje del cual puede potenciar de manera adecuada los conocimientos que está adquiriendo

 

A lo planteado anteriormente se suma un aspecto que debería vincular a las dos partes y que es de suma importancia por la repercusión que tiene dentro del proceso enseñanza-aprendizaje que es la motivación que debe de incentivar el docente hacia el estudiante y que debe partir de aspectos como promover la estimulación a partir de la imaginación y creatividad del estudiante, generando la motivación adecuada de que el aprendizaje se visualice no tan solo como conocimientos que se adquieren, sino que a partir de estos se forjen y generen ideas que se puedan llevar a la práctica y tengan ese sentido de utilidad en la vida diaria de los estudiantes

 

Por eso la parte que genera la idea del aprendizaje del estudiante depende más de la motivación, estimulación o carga emocional que este manifieste identificándolos y encontrándolo dentro de los conocimientos a través de los temas académicos que el docente pueda compartir y transmitirle.